Por Héctor Gamboa Soto
El día de hoy el Tribunal Electoral del Estado de Nayarit ventiló un asunto en que la presidenta municipal de Tepic Geraldine Ponce, acusó al periodista Genaro Martínez Haro por criticarla.
Genaro Martínez ha sido un constante crítico de la presidenta municipal Geraldine Ponce, pero siempre refiriéndose a su conducta como funcionaria pública, a la que ha tildado como veleidosa, despilfarradora y que predica la austeridad de la cuarta transformación, pero que en la práctica, día a día demuestra un comportamiento que distan mucho de lo que predica.
Sus constantes viajes internacionales, el hecho del despilfarro en muchos programas y la constante mentira sobre obras que son simplemente cosméticas y no de fondo, que en la cuenta pública aparecen como si fueran verdaderas rehabilitaciones, son la constante.
Además, ella no puede de ninguna manera decir que se le critica por su relación con el Señor Alejandro Galván, que es pública y notoriamente su concubino, puesto que ella misma ha difundido videos, como en su casa, cuando Galván fue detenido en ese lugar por la autoridad competente.
El simple hecho de tener una relación afectiva los pone en el supuesto del nepotismo, al tener Galván el nombramiento de jefe de gabinete, siendo su pareja sentimental.
Ella tiene todo el derecho de tener a la pareja que le dé su gana, lo que no es cuestionado, si no el hecho de que su pareja es la que decide importantes cuestiones de la vida pública, cayendo en el supuesto del nepotismo.
Genaro Martínez ha criticado tal situación, por lo que la señora Ponce lo denunció ante el Tribunal Electoral, supongo que por cuestiones de violencia de género.
El propio Genaro Martínez ha dicho que no la critica por su condición de género sino por otras cuestiones. Transcribo un comunicado que hizo:
«Pretende sancionarme y con ello inhibir mis críticas a su trabajo como presidenta municipal y a la influencia que sobre ella ejerce su jefe de gabinete, Alejandro Galván Araiza».
«La acusación en mi contra no es porque la llame “diva” o porque haya compartido un artículo donde se refieren a ella como “Geralván”, un apodo que le ha ganado la simbiosis política y personal que mantiene con el padre de su pequeña hija».
«Lo que de verdad le incomoda, por lo que me quieren callar, es porque exhibo constantemente información que demuestra la corrupción en su gobierno, la incongruencia entre sus dichos y sus acciones y su terrible ineficacia en la administración que encabeza».
«Yo tengo la frente en alto y estoy convencido de que mi labor informativa debe continuar».
«Hace días, la propia alcaldesa lo dijo: sostuvo que se defendería de los ataques de la prensa “por ser mujer, por ser joven y por ser mamá”.
«Nunca se le ha criticado eso, se le critica por ser ineficaz, corrupta e incongruente. Y eso lo seguiremos haciendo porque es nuestra obligación como ciudadanos y en mi caso, como comunicador».
En lo personal me solidarizo con el compañero Genaro Martínez Haro, quien cumple con su labor de comunicar y de dar a conocer lo que a su juicio daña a la comuna de Tepic.
Pretender callar una voz crítica, a un comunicador que tiene años de experiencia y que asume con responsabilidad lo que dice, es pretender callar a la prensa.
Si ahora que es una simple presidenta municipal la señora Geraldine Ponce actúa de esa manera censurando y reprimiendo a la prensa, no queremos pensar en lo que hará si llegara a la gubernatura.
Expreso Genaro Martínez mi solidaridad, esperando que las autoridades competentes determinen que es una cuestión ridícula y que va contra la propia Constitución de la República, el querer callar una voz crítica.
