💩 ¡ATENCIÓN!… sabrás también porqué medios de difusión importantes, medianos e insignificantes, mantienen un escandaloso y vergonzoso silencio en torno a lo revelado por la periodista Carmen Aristegui.

Por Sebastián Zavala

HABLEMOS PRIMERO
DE DESINFORMACIÓN, así que tómate un tiempo para revisar la historia del periodismo en México y el manejo de la información que debiera ser de interés público; encontrarás que la desinformación se desarrolló al parejo, e incluso con ventaja.

Esto porque la información es negocio y desde siempre, el gobierno en turno utilizó herramientas variadas para controlar a los comunicadores: Acaparamiento del papel donde se imprimían los diarios, institucionalización del «chayote» y por supuesto, la represalia.

Fue en la década de los 60’s cuando se agudizó la desinformación pública a través de los medios de difusión impresos, y se «perfeccionó» en los electrónicos.

En este contexto nacieron los noticieros de radio y televisión, que por su agilidad y gratuidad, pronto se volvieron la punta de lanza del gobierno de Gustavo Díaz Ordaz.

NACE EL MONSTRUO

Es al final del sexenio del horroroso «Trompas» cuando se inaugura, en el entonces Telesistema Mexicano (antecedente de Televisa) el tristemente célebre «noticiero 24 Horas», bajó la conducción y dirección del judío Jacobo Zabludovsky.

Se dice que través de él, del «Güero», el gobierno asesino de Ordaz manifestó en la noche del 2 de octubre de 1968: «Hoy fue un día soleado», resumen perverso qué hizo de lado por completo la masacre ocurrida horas antes.

Pero Jacobo no fue el único caso de DESINFORMACIÓN

«En su mayoría, los escritores de los diarios se habían dedicado a estereotipar y desacreditar a los estudiantes, y con ello los descalificaban. Eran alborotadores, rebeldes, agitadores, irresponsables, instrumentos de fuerzas externas e ideologías exóticas, todo menos ciudadanos. Particularmente desde el 27 de agosto, los medios cerraron filas contra ellos», escribe Ana María Serna en «La vida periodística mexicana y el movimiento estudiantil de 1968».

Según Carlos Monsiváis, sólo el noticiario de Excélsior y el conductor Jorge Saldaña darían espacios en ese medio de comunicación a profesores y estudiantes para exponer sus demandas.
Además, Noticias de Excélsior decidió transmitir el 2 de octubre a las once de la noche, ocho minutos de imágenes que grabaron en Tlatelolco, donde se apreciaba gente huyendo de las balas.

UN ATREVIMIENTO QUE LA COOPERATIVA PAGARÍA MUY CARO… (Continuará mañana…)